Hay dos términos que tienen que quedar bien claros, el Ph y la EC:
El PH ( potencial de hidrógeno) nos sirve para medir la acidez o alcalinadad del agua. la escala suele ser de 0 = muy ácida a 14 = alcalina, siendo 7 un Ph neutro. La planta del cannabis acepta un Ph entre un 5,8 y 7, siendo 6,4 lo más apropiado si cultivamos en tierra. En la siguiente tabla podréis ver como a diferentes Ph´s asimila uno u otro nutriente.
Para conseguir que nuestra agua tenga el Ph adecuando habrá que corregirlo con un "PH menos" o con un "PH más", aunque raras veces se utilice "Ph más". El "PH menos" es un ácido, lo puedes comprar en cualquier tienda de cultivo o puedes utilizar vinagre común, el de cocina. También necesitarás un medidor de Ph, los venden digitales o bien en gotitas. A la larga sale más económico el digital, y es mucho más preciso.
La forma correcta para utilizarlo es esta:
1-Primero mezclas los abonos con el agua para regar.
2- Mides Ph.
3- Si ves que no está en 6,4 le añades el ácido poco a poco hasta que marque 6,4. La cantidad de ácido que se utiliza es poca, para 5 litros de agua se suele utilizar 1,5 mililitros de Ph menos, mas o menos.
Una vez que sepas la cantidad de Ph menos necesaria debes apuntarla, así la próxima vez tardarás menos en regar y te evitaras hacer la medición.
La EC (Electroconductividad)
La medida de la "EC" es muy importante, con ella sabremos la cantidad de sales disueltas en nuestra agua, si nuestra agua es dura o blanda, y también la utilizaremos para saber la dosis de abono necesaria.
Para ello necesitaremos un medidor de EC digital.
Lo primero de todo es averiguar la EC de nuestra agua de grifo, esta puede variar muchismo dependiendo de donde vivimos. Puede ser que nos encontremos con valores muy bajos del 0,1 y tengamos que utilizar algún suplemento de Calcio y Magnesio, o puede que tengamos un agua muy dura con una EC del 0,8, o incluso de 1,2. En este caso y con una EC tan elevada tendremos que rebajar nuestra agua con agua osmotizada o de lluvia. Lo que buscamos se llama el "Agua Base", un agua con una EC de 0,4.
Para preparar un agua base debemos tomar una muestra de agua de grifo y mediremos EC con un medidor de Ec.
Si la muestra es inferior a 0,4 añadiremos Calcio y Magnesio hasta que el medidor indique 0,4. El calcio y magnesio se compra en las tiendas de cultivo (Growshops). Si la muestra indica una EC mayor a 0,4 debemos rebajar con agua osmotizada, de lluvia, desmineralizada, etc..., estas tienen una EC de 0,01.
Por ejemplo: Si nuestra agua de grifo marca 1.0, entonces utilizaremos mas o menos un 55% de agua de lluvia y 45% de grifo.
Una vez tengamos nuestra agua base a 0,4, lo único que tendremos que hacer es ir añadiendo abono hasta llegar a la Ec que le corresponda a la fase en que se encuentre la planta. No todas las plantas "comen" la misma cantidad, por eso es mejor ir añadiendo poco a poco e ir viendo como lo asimilan.
Si utilizas una buena tierra con bastantes nutrientes no hará falta subir mucho la Ec. En crecimiento no abones a no ser que veas carencias significativas. En Floración se deberá abonar con cuidado, empezando con un 0,8 e ir viendo como lo asimila la planta, si vieras que empiezan a tener alguna carencia entonces le subes un poco a 1,0. Cuando una planta está al limite, o con una EC máxima, empieza a hacer "garra", las hojas empiezan a doblarse hacia abajo, esto sucede a los 5 o 10 minutos de haber regado. Cuando veas esto reduce la Ec del agua. Si nos pasamos podemos quemar la planta. Otro síntoma de exceso es que las puntas de las hoja se queman y se retuercen.
La temperatura del agua de riego también es importante para que pueda asimilar todos los nutrientes. Lo suyo es preparar el agua y dejarla junto a la zona de cultivo, así tendrá la misma temperatura que las raíces y no sufrirá ningún "Shock" al regar. El agua debe ser tibia, entre los 17 y 21ºC.
